José Juan Badía

Recuerdos de Anjara

"Al atardecer Anjara, vestida de minaretes, se hace eco de llamadas a la oración, unas pocas horas antes las campanas de la Parroquia de la Visitación revolotean sembrando sones de Sacramento compartido.

Todo es contraste, y es que Jordania toda ella es un continuo mosaico de contrastes. Inmersos en ese mar de realidades diversas, estábamos nosotros, extraños acercados, en la arriesgada aventura de hacer dejándose hacer.

Dejamos una siembra, Dios sabe para que frutos. En la tierra de mi memoria guardo, como tesoros nuevos, la bravura de aquellas universitarias llenas de ganas de aprender; la atención de los adolescentes, intentando en sus luchas, conocer actividades para dar sentido al tiempo de ocio; la curiosidad, siempre sonriente, de aquellas mujeres reunidas; y especialmente, las miradas intensas, de los niños, faltos de horizontes y llenos de espontáneos presentes. Y con gratitud inmensa, emocionada y estremecida, reconozco la labor, el sacrificio, la dedicación que ha significado para todos llevar adelante, día a día, ese proyecto de animar a que pudiesen llevar a la vida todo lo que comporta un Esplai.

Que Santa María bendiga a todos -As saläm âlaiki, iä Mariam- "
28 agosto 2007

Llama de lámparas….

01.- “Tu luz nos hace ver la luz”

No hace mucho me desperté durante el sueño de la noche. Suelo dormir sin interrupción y concentrado, ya que las horas de sueño de que dispongo son pocas duermo con más mas intensidad y así me cunde....
Aquella noche, al despertar, tenia una imagen fija en la mente, parecía real. Era la de una llama intensa, vivaz y al mismo tiempo muy sencilla. Su luz tenue desprendía un suave calor y hacia agradable la estancia. No era un fuego que todo lo arrasa. Era una luz que descubría la luz. Aquella humilde llama reflejaba una luz más grande que todo lo recubría de belleza y de armonía.
La imagen duro un tiempo en mi mente. Procuré conservarla todo el tiempo que pude, me hacia bien. Cuando desapareció sentí una cierta tristeza, pero había dejado un poso, un reflejo; no estaba y seguía en mi recuerdo, ahora ya no era una imagen, una visión mental, era un recuerdo, una huella.
Pensé en el proyecto Jordania. Es una sencilla, humilde y entusiasta llama que brilla en medio de un mundo difícil de iluminar. Llevaremos esa llama. Aquellos niños, adolescentes y jóvenes también nos ofrecerán su pequeña llama, y al marchar, todos tendremos con nosotros la huella de ese haber compartido juntos nuestras pequeñas luces.
Y podremos decirnos los unos a los otros:
“tu luz nos hace ver la luz”.
Julio 2007

01.- “En la teva llum trobem la llum”
No fa gaire vaig despertar-me mentre dormia. Normalment dormo sense interrupció i profundament, com que les hores que tinc per a dormir son minses dormo amb mes intensitat i així ho aprofito mes. Aquell nit, en desvetllar-me, tenia una imatge fixa en el cap, semblava real. Era una flama intensa, vivaç i ensems senzilla. La seva llum tènue desprenia un suau calor i feia agradable l’estada. No era com un foc que tot ho consumeix. Era una llum que descobria la llum. Aquella flama humil reflectia una llum mes gran que tot ho embolcallava de bellesa i harmonia.
La imatge va mantenir-se un temps en el meu cap. Intentava conservar-la tot el que vaig pogué, em feia be. En desaparèixer vaig sentir una certa tristor, però havia deixat un pòsit, un reflex, no hi era i continuava en el meu record, ara ja no era una imatge, una visió mental, era un record, una petja. Vaig pensar en el projecte Jordània. És una senzilla, humil i entusiasta flama que brilla en mig d’un mon difícil d’il·luminar. Portarem aquesta flama. Aquells nens, adolescents i joves també ens oferiran la seva petita flama, i al acomiadar-nos, tots tindrem amb nosaltres la petja d’aquest haver compartit junts les postres petites llums.
I podrem dir-nos els uns als altres “en la teva llum trobem la llum”. Juliol 2007

02.- “Me enseñarás el sendero de la vida”

Te has presentado a la cena con un ramo de hortensias recién cortadas. ¡Todo un detalle, por tu parte¡
Mientras tomábamos unos refrescos y la conversación nos entretenía del tedio del atardecer, me he fijado en el jarrón donde las han puesto. Atraen mi atención las voluminosas esferas tupidas de pequeñas flores color malva y fucsia. Se agradece el toque verde de las hojas en contraste con el subido tono de los pétalos.
La naturaleza, ha ido aprendiendo, generación tras generación, el arte de sobrevivir evolucionando con belleza.
Tal vez sea esa la asignatura más difícil para todo ser vivo: aprender convirtiendo en bello y armónico lo aprendido.
Ahora, ya en casa, miro las fotos de los niños de Anjara. Me pregunto si ellos, y todos los demás niños en el mundo, estarán creciendo transformando en belleza lo aprendido.
Pienso que irrumpiremos en sus vidas como aquellas flores, cortados temporalmente del jardín de nuestros espacios habituales. Intentaremos aportarles algo de lo aprendido, y nos llevaremos experiencias nuevas para nuestro aprendizaje.
Lo hermoso será haber asistido juntos, ellos y nosotros, en estos días, a la escuela del sendero de la vida. Pido a Dios, a la vida, a la sabiduría que anida en el fondo de cada ser, que sepamos luego mudarlas en primaveras de existencias.

Julio 2007

02.- “M’ensenyareu el camí que du a la vida”

Has vingut al sopar amb un pomell d’hortènsies acabades de collir. !Quin detall, per part teva!
Mentre prenem unes begudes i ens entretenim del ensopiment del capvespre amb converses, m’he fixat en el gerro on les han posades. M’atrauen les voluminoses esferes atapeïdes de petites flors colrades de malva i fúcsia. S’agraeix l’espurna verda de les fulles en contrast amb el to pujat dels pètals. La natura ha anat aprenent, generació rera generació, l’art de sobreviure evolucionant amb bellesa.
Potser sigui aquesta l’assignatura mes difícil per a tot ésser viu: aprendre convertint en bell i harmònic el que s’ha après. Ara, que soc a casa, guaito les fotografies dels nens d’Anjara. Em pregunto si ells, i tota la resta de nens del mon, estaran creixent transformant en bellesa l’après.
Penso que apareixerem a les seves vides com aquelles flors, tallats temporalment del jardí del nostres espais acostumats. Intentarem aportar-los quelcom del que hem après, i ens emportarem noves experiències pel nostre aprenentatge.Preciós serà haver assistit junts, ells i nosaltres, en aquest dies, a l’escola del camí de la vida.
Prego a Déu, a la vida, a la saviesa que nia en el fons de cada ésser, que sapiguem després fer-ne brollar primaveres d’existència.
Juliol 2007